Felicidad para todos los implicados, persiguiendo un ideal realista

Kazuto Nagai

TYPICA cuenta con un equipo de expertos cafeteros, un grupo de personas con amplia experiencia en el sector del café. Uno de sus miembros, Kazuto Nagai, es responsable del control de calidad y de la comunicación con las grandes y medianas empresas cafeteras.

Durante los 13 años que trabajó para Camel Coffee, que dirije la finca Kaldi Coffee Farm, se encargó principalmente de la compra de granos de café verde y del control de calidad. También participó en el desarrollo de nuevos productos, como una línea de cafés que conecta las zonas de producción con los consumidores. El traslado de Nagai a TYPICA, después dejar un empleo razonablemente gratificante, se debió a un dilema irresoluble relacionado con la cadena de suministro existente.

No quería que nadie fuera infeliz

Aunque a todos se les llame “productores”, existe una gran diferencia en sus situaciones. El que los gerentes de las grandes plantaciones sean ricos, no significa que los empleados que trabajan en ellas vivan bien. Algunos pequeños productores ni siquiera logran llegar a fin de mes.

Pero no por los compradores les van a comprar su café al precio que ellos quieren. Si aumenta el precio de venta en las tiendas, los consumidores que esperan con ansias el café tendrán dificultades para comprarlo. Mientras vivamos en una sociedad capitalista, no podremos escapar de su mecanismo… Nagai se enfrentó a este dilema durante muchos años en su anterior trabajo.

—Estábamos desarrollando productos de alto valor añadido mediante una línea de cafés que conecta las zonas de producción con el consumidor, pensando en cómo garantizar que ambos lados de la cadena de suministro —productores y consumidores— queden siempre satisfechos. Sin embargo, los precios de oferta subían y bajaban debido a las fluctuaciones del mercado no relacionadas con el costo de producción, lo que provocaba la competencia entre los minoristas; pero yo no encontraba una solución.

Si se lograra hacer más eficiente toda la cadena de suministro, sería posible ofrecer el producto al consumidor a un precio más cercano al original, lo que beneficiaría tanto a los productores como a los consumidores. En el 2020, Nagai dejó Camel Coffee —donde había trabajado 13 años— para entrar a una empresa de alimentación que asumía el reto de eliminar el despilfarro, la irregularidad y la sinrazón en la distribución. Luego de trabajar en un proyecto de desarrollo de productos ahí, se incorporó a TYPICA.

—Mediante la transformación digital, que recopila datos detallados de los clientes y los utiliza para el marketing, se buscaba acabar con el desperdicio de alimentos causado por hacer pedidos que no se sabe si se venderán y poner fin al desarrollo de nuevos productos que nunca llegan a las estanterías. Sin embargo, para ello teníamos que pedir a los fabricantes de los que nos abastecíamos que bajaran sus precios, y me di cuenta de que se requería la cooperación de muchas partes. A pesar de todo, fue positivo saber que existe un modelo de negocio capaz de agilizar la cadena de suministro y mantener bajos los precios finales.

Café para disfrutar de la diversidad

Se suele decir que el comercio del grano de café verde es un negocio en el que las emociones y las relaciones personales juegan un papel crucial. Esto se debe a que el café, al ser un cultivo agrícola inestable tanto en rendimiento como en calidad, sumado a la gran fluctuación de los precios de futuros, ve su estabilidad garantizada, en cierto modo, por la confianza y las relaciones entre las personas.

—Hace poco me encontré después de mucho tiempo con un caficultor con el que estudié en Brasil para sacar un título hace 12 años. No le reconocí de inmediato porque tanto él como yo habíamos cambiado, pero a medida que hablábamos, empezamos a revivir recuerdos el uno del otro. Cuando me dijo: “Me alegro de que hayas vuelto al negocio del café”, me conmoví profundamente y, aunque quizá suene arrogante, sentí que quería contribuirle de alguna manera.

—Lo que hace especial al café es que en su valor y sabor, también influyen la personalidad, la filosofía, el modo de vida y el enfoque del trabajo de los productores. Lo digo porque, al visitar las zonas de producción como comprador e interactuar con los productores, me di cuenta de que todo influye en el sabor del café: desde la elección de una variedad de grano adecuada para la zona, hasta la experimentación con nuevos métodos de beneficiado, o el trabajo en pro del cuidado del medio ambiente.

La Asociación de Cafés Especiales (SCA) ha estado promoviendo en los últimos años un método de evaluación que no se limita únicamente a las puntuaciones de cata, y creo que se convertirá en un estándar en la industria del café de especialidad. Por eso creo que el café tiene un espectro de gustos mucho más amplio que el de otros alimentos y bebidas.

Nagai nos cuenta todo esto, pero no fue hasta después de entrar a Camel Coffee que empezó a interesarle el café. Cuando probó por primera vez la Geisha panameña en 2009, no podía creer que existiera una bebida tan rica.

Antes de entrar a trabajar apenas había ido a alguna cafetería, y no sabía que el café sabe distinto según la región y la variedad. Solo le entusiasmaba la idea de trabajar en algo atractivo como el café. Aunque buscaba trabajo en el sector alimentario porque le “encantaba comer”, fue con Camel Coffee donde surgió la oportunidad.

Por otra parte, el que entrevistó a Nagai tenía una razón clara para contratarlo. Después de que Nagai se incorporara a la empresa, su supervisor le explicó los motivos de su contratación.

“La capacidad de distinguir los sabores del café se podía perfeccionar después de entrar a la empresa, pero lo más importante era el conocimiento del sabor que se adquiere a través de la experiencia de haber probado una variedad de alimentos, que es algo que no se puede obtener después.” 

Recuerda que desde pequeño picoteaba el refrigerio de sus padres y le gustaba tomar té matcha y café. Tenía sus gustos, pero no rechazaba la comida si le preguntaban “¿quieres?” sin antes probarla. 

Durante sus años universitarios invirtió mucho tiempo y dinero saliendo a comer. Cuando estuvo de moda la sopa de curry visitó muchos locales, desde cadenas de restaurantes hasta pequeños restaurantes privados, independientemente del tipo de restaurante o de su popularidad.

—Me gustaba ir a diferentes tipos de restaurantes. En lugar de intentar encontrar un sabor que me gustara, disfrutaba de las variaciones de sabor de algún plato, o de cómo cambiaba su sabor si iba otro día. No sé si lo que quiero es disfrutar de la diversidad, o si me gusta aventurarme a lo desconocido, o si simplemente me aburro fácilmente… Sea como fuere, no era de los que se apegan a un restaurante o a un gusto en particular.

No es de extrañar que esos hábitos le resultaran útiles en su trabajo. Para Nagai, encargado de mantener el sabor de la mezcla de la casa Kaldi: “Mild Kaldi”, era extremadamente importante saber conservar el sabor del café que tenía grabado en su memoria, sin mezclar sus gustos personales; el sabor del café que cató en la zona de producción que iba más allá de los puntos o comentarios de sabor.

Pensé que era un sueño

TYPICA ha lanzado un nuevo modelo en agosto del 2024. Una de sus principales características es una lista de deseos que muestra los cafés deseados a los productores de todo el mundo. Es un sistema donde los compradores registran la variedad, el método de beneficiado, el precio etc. que desean, y los productores les envían ofertas personalizadas. Tiene el potencial de eliminar la asimétrica de la información entre vendedores y compradores, y posibilitar transacciones equitativas y transparentes.

—Usar la tecnología para proporcionar directamente a los productores datos sobre la demanda, optimiza la cadena de suministro y elimina el despilfarro, la irregularidad y la sinrazón. Además, TYPICA asume el reto de cambiar la estructura de la industria recibiendo inversiones de las sociedades de capital emprendedor y de inversionistas. Mi percepción de esta empresa como una que no se deja limitar por los marcos existentes no ha cambiado, ni antes ni después de haber entrado.

—Crear un mundo en el que todos los implicados en la cadena de suministro como productores, tostadores, consumidores, exportadores y almacenistas estén satisfechos… En mi anterior trabajo siempre pensaba en eso, aunque era consciente de que era un ideal. Pero en TYPICA, puedo perseguir ese ideal y sentir que cada vez está más cerca de hacerse realidad.

—Han pasado casi 20 años desde que el concepto de café de especialidad llegó a Japón, y aunque ha logrado asegurarse un lugar en el mercado cafetero, aún tiene margen para crecer. Creo que TYPICA podría ser el catalizador de este crecimiento. Ahora, al mirar hacia atrás, me pregunto si habría sido diferente en Camel Coffee si hubiera tomado la iniciativa y trabajado para cambiar la cadena de suministro.

Sin embargo, no suele ser sencillo cuando se negocia con tostadores medianos y grandes. Muchas veces se reciben reacciones negativas, y la atención de los clientes se basa más en preocuparse por si realmente se puede garantizar un suministro estable, o si se podrá sustituir el café si por alguna razón no se obtiene la calidad o cantidad previstas, o que el estilo difiere de los métodos tradicionales o de su estilo de ellos.

—No hay una única solución, así que el primer paso es escuchar atentamente el problema que tiene cada empresa. Al mismo tiempo, hay que animarlos a tomar la iniciativa para hacer realidad sus ideales e innovar, aunque ello implique asumir riesgos.

—El café es un cultivo agrícola y los riesgos siempre están presentes. Si eres comprador, puede que no llegue la calidad esperada; si eres vendedor, puede que no se venda la cantidad esperada; en asuntos de logística, puede que el barco no llegue a tiempo al puerto, etc. A menudo surgen problemas de este tipo, pero creo que un comercio directo y transparente respaldado por la confianza, puede identificar la causa del problema y conducir a mejoras.

—A falta de historias de éxito, uno duda antes de dar el primer paso. Por eso queremos compartir la experiencia de cómo el comercio directo puede abrir nuevas oportunidades, con la esperanza de que más empresas se animen a dar ese primer paso.

Por ejemplo, si quieres ir a la luna y no sabes que existen los cohetes, lo sentirías como un sueño imposible. Sin embargo, esto se convierte en un ideal realista cuando te enteras de que hay gente realizando experimentos para volar cohetes a la Luna. Para Nagai, que nunca renunció a encontrar la solución al dilema al que se enfrentaba en su anterior trabajo, TYPICA es como ese cohete.

—Si nos ponemos a pensar, el objetivo (fijado por TYPICA) de distribuir un 33% de Arábica en su propia plataforma suena algo descabellado. Pero en lugar de pensar en si se hará realidad o no, creo que lo importante es hacerlo si existe la manera de conseguirlo. Pienso que elegí trabajar en TYPICA porque sentí que alcanzar mi ideal no era del todo irreal.